Hoy en día es poco frecuente encontrar a alguien que no tenga al menos un perfil en redes sociales y aún pudiendo darse el caso es seguro que al menos dispondrá de una cuenta de correo electrónico, debido a esto y a que cada vez es mayor el volumen de información personal volcada en internet, la frecuencia de delitos como la suplantación de identidad, el hacking y el phishing ha aumentado en los últimos años.
A continuación te explicamos en que consiste cada caso y como prevenirlo:
Se considera suplantación de identidad el acto de hacerse pasar por otra persona en internet generalmente para llevar a cabo actividades de carácter ilegal con la información obtenida. Nos encontramos por lo tanto con una tipología de delito que atenta contra el honor y la privacidad personal, además de vulnerar el derecho a la propia imagen. La suplantación de identidad puede llevarse a cabo de diversas maneras, entre las que destacamos las más frecuentes:
- Creando un perfil falso: En este caso se recopila información que se encuentra de manera pública en las redes sociales como pueden ser fotografías, nombre, dirección y a partir de ahí se crea un perfil que podrá ser usado para realizar comentarios ofensivos a terceras personas o extorsionar y/o acosar a la víctima con el fin de recibir algo a cambio.
- Mediante el phishing: El phishing es una de las prácticas más extendidas en lo relacionado con los ciber delitos, consiste en el uso de correos electrónicos o comunicaciones vía redes sociales que simulan venir de fuentes legítimas y donde se nos pedirá cierta información de cara a evitar un perjuicio. En algunos casos estos mensajes falsos suelen tener tan alto nivel de detalle que los afectados llegan a confundirlos con una comunicación veraz de, por ejemplo, una entidad bancaria, una red social o un servicio de información en la nube. Generalmente se nos pedirá que proporcionemos nuestro usuario y contraseña debido a que un fallo técnico o una brecha de seguridad ha puesto en peligro las bases de datos de la entidad simulada.
¿Es siempre la suplantación de la identidad un delito?. La respuesta es sí. En el momento en el que se suplanta la identidad de otra persona, por el medio que sea, se está atentando contra el derecho a la propia imagen de la misma, derecho recogido en el artículo 18 de la Constitución Española. Casos más graves de suplantación de identidad pueden incluso conllevar penas de cárcel cuando la información obtenida sea usada para causar un perjuicio grave a la víctima (artículos 197, 264 y 401, entre otros, del Código Penal).
Para evitar ser víctima de estas prácticas es recomendable llevar a cabo las siguientes medidas de prevención y seguridad:
- Usar contraseñas robustas: Una contraseña robusta es aquella que contiene una combinación de letras en mayúsculas, minúsculas, símbolos y números. De esta manera se dificulta más a los programas usados por los delincuentes la obtención de las contraseñas. Como medida adicional recomendamos cambiar estas contraseñas cada dos o tres meses.
- Configurar la privacidad de los perfiles en redes sociales: Es un apartado donde rara vez se dedica tiempo en su configuración y aún así destacamos su importancia. En toda red social se nos permite configurar la privacidad de nuestro perfil, pudiendo de esta manera limitar el rango de información proporcionada sin nuestro conocimiento. También es recomendable no compartir fotos de carácter sensible o comprometedor, de esta manera minimizamos el posible daño en caso de ser víctima de alguno de los delitos ya mencionados.
- Prestar atención a toda comunicación recibida de una entidad bancaria, red social o plataforma digital donde se nos pida información personal: Generalmente en las comunicaciones simuladas mediante el phishing se pueden encontrar faltas de ortografía o direcciones URL extrañas. Por ello recomendamos revisar al detalle estas comunicaciones y en caso de duda no facilitar ninguna información y contactar con los canales de contacto veraces de la plataforma en cuestión.
Si aún siguiendo estas medidas sufrimos un caso de suplantación de identidad deberemos recopilar el mayor número de pruebas posibles (capturas de pantalla, fotos, comentarios) y denunciarlo tanto en los portales de las mismas plataformas, como ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado.